martes, 3 de junio de 2008

¿Y el juramento hipocrático?

Ayer, viendo que la diarrea del peque no remitía decidimos irnos a urgencias, ya que pedir cita para el día en el hospital es algo casi imposible. Llegamos allí casi a las 21.00 y nos volvimos a casa a las 22.55 cansados de esperar, de que nadie nos dijera nada y con Dani llorando desconsoladamente. Cuando nos fuimos estaban empezando a entrar los niños que habían llegado ¡a las 19.30! ¿Qué pasaba? Por lo que pude enterarme, habían tenido una urgencia en planta y andaban muy retrasados los pediatras. Eso casi lo podría aceptar en un hospital público, pero en uno privado... pues la verdad es que no. Lo normal es que informen cuando llegan los pacientes de que la espera se puede demorar más de dos horas. Cuando nos fuimos aún quedaban por delante de nosotros 7 niños. Lo único que hicieron fue darnos un termómetro, cuando y les habíamos dicho que no tenía fiebre. Lo extraño es que no pasaron a por ellos, algo que suelen hacer, por lo menos han hecho las veces que hemos ido. De verdad que me parece lamentable. Puedo entender que para ellos los pacientes sean como un número (de cuenta corriente por cierto); pero para los padres que llevamos a nuestro peque al médico, verle llorar desconsoladamente es muy importante, casi desgarrador. ¿Faltan médicos? Pues que contraten a más, que seguro que hay unos cuantos engrosando la lista del paro. Y bien que cobran los honorarios a los seguros. Porque para eso sí que no hay que esperar. No puede ser que un hospital que está casi exclusivamente dedicado a los niños, como si fuera una maternidad grande, sólo tenga un pediatra de guardia que tenga qe atender las urgencias externas y las de planta. ¿Dónde quedó el juramento hipocrático? ¿Es que sólo ven la salud como un negocio? Pues flaco favor que se han hecho con tantos padres que llevaban esperando dos horas y lo que les quedaba. En cuanto abran el ambulatorio me pegaré con el teléfono de pedir cita para conseguir que un pediatra vea al peque. Seguramente para ellos no sea nada; pero para mí, hablamos de la salud de Dani, que es algo sagrado y vital. Puede que sea un virus, o que sea la reacción de las vacunas... pero no puedo plantearme ponerme a estudiar medicina pediátrica a estas alturas de mi vida. Tengo que llevarle a un sitio donde me puedan decir qué le pasa y algo para que vuelva a la normalidad. Si he hecho algo mal, que me lo digan y lo remediaré, pero el no saber qué se lo produce me está empezando a poner nerviosa. El Tiorfan no funciona como debería y, aunque el peque está hidratado e intenta estar contento, lo cierto es que no come como antes y me temo que puede estar incluso perdiendo peso. Ahora mismo, tengo un cabreo con las urgencias pediátricas de Torrelodones que creo que lo mejor es no seguir escribiendo.

2 comentarios:

Médico dijo...

¿No puede entender que hijo con diarrea tiene que esperar mientras los pediatras atienden una urgencia vital?
¿Hasta dónde llega el egoismo?
¿Qué tiene que ver que sea privado o público? En ambos casos, el médico lo abandona todo para atender a un niño con una parada cardiorrespiratoria.

Sí, también en nuestro hospital damos un termómetro a TODO niño que acude a urgencias. Y de vez en cuando sale alguna lista diciendo que para qué, que su hijo no tiene fiebre.

En todos los hopsitales del munodo (dado el uso inadecuado y masivo que hace la población de las urgencias) se hace una cosa llamada valoración o "triaje". Una de las cosas que se hace (otras usted no las aprecia) es tomar la temperatura a los niños, y tomar la tensión arterial, tempratura y frecuencia cardiaca a los adultos. Esta medida es universalmente aceptada y salva vidas porque ayuda a establecer el orden de prioridad.

A mi lo que me parece lamentable es su comentario. Y es usted la que cree somos números. Somos personas. Si ha un niño muriendo en planta, los padres que tienen niños con faringitis, moquitos y diarrea, lo que tienen que hacer es callarse y esperar o largarse al Centro de SAlud que es lo que tenían que haber hecho desde el primer momento, en vez de ir a colapsar al hospital.

Ultreiacris dijo...

Hola Médico:D

Primero, nadie sabía lo que tenía mi peque. Segundo, nos enteramos de retruque que estaban con algo ocurrido en planta, que de vital tenía poco por lo que nos enteramos después. Tercero... lo normal es informar, por lo menos las enfermeras, y no que mandaron a los guardias de seguridad para decirnos que los niños tenían que callarse. El termómetro se lo mostré a la enfermera y ¿de qué les sirve si luego no lo recogen?

Yo no creo que los médicos sean números; pero puedo asegurar que su actuación del otro dia fue lamentable, de hecho quedó constancia con varias quejas de padres y de enfermos que estaban allí.

Y sinceramente, viendo tu comentario, te falta bastante educacion.